10 hores por una carretera muy mala, las primeras dos horas con un
paisaje precioso con grandes peñascos rocosos, el resto monotono con
grandes charcos rodeados por mucha mucha vegetación
De pronto ya era de noche y se oye un frenazo y un barraban,
atropellamos dos vacas que rompieron un faro y el cristal delantero
del bus.
Al llegar a Parnaima me ofrecieron hospedaje en la Pousada Suiza.
Una pareja mixta brasileira suizo tienen una pousada, estuvieron
encantadores conmigo, en su quark me llevaron al hotel a dejar el
equipaje y luego me acompañaron a cenar en el paseo, no se suele
encontrar gente tan amable.